domingo, 20 de febrero de 2011

Conferencia de Alberto Artero en La Coruña

Cartel de la conferencia.

 Este viernes asistí a la conferencia de Alberto Artero, S.McCoy de El Confidencial Digital.  Una conferencia sobre educación para padres que organizaron, con gran éxito, las Apas de los colegios de Fomento, Montespiño y Peñarredonda.

En primer lugar, me llamaron la atención los 39 años del conferenciante -39- y sus 5 hijos. El pelo blanco no corresponde ni a su edad ni a rostro juvenil. Su charla estuvo plagada de numerosas referencias personales y familiares, ejemplos directos de lo que se comentaba.

Alberto Artero es licenciado en Ciencias Empresariales por ICADE y su experiencia laboral se refiere fundamentalmente al ámbito financiero tanto en mercados como en prensa económica.

Pero Artero, que no ha trabajado ni es experto en Educación, no vino a hablarnos de mercados, vino a hablarnos del sentido común aplicado a la educación de nuestros hijos sobre la base de su experiencia vital.

Había leído un par de artículos de Alberto Artero y me gustaron. Tenía interés en sus recetas o propuestas para los padres y me llevé la grata sorpresa de oír reglas que me sonaban mucho, no sólo por haberlas mamado de niño, también porque las vengo aplicando en mi propia familia.

Esfuerzo, austeridad, respeto, responsabilidad, trascendencia, comunicación y espiritualidad. Esas 7 palabras resumen la conferencia y son las palabras claves también de la educación familiar que también se plasma en la frase de actitud frente a aptitud.

En una sociedad sin valores, la formación -incluidos los idiomas- es, y en el futuro más todavía,  relativamente mucho menos importante que el criterio y la actitud. La educación no está sujeta a la crisis económica. La educación es estructural y no coyuntural. Por eso, las grandes oportunidades serán para los jóvenes que se formen sobre la base de esos principios y valores y que tengan buenas actitudes y criterio propio.  Lo importante no es la meta, es hacer bien el camino, esforzarse en ese camino.

Esa es la educación que recibió Alberto Artero, esa es la educación que recibimos la mayor parte de los españoles que pasamos de los 40. Por un efecto péndulo, muchos padres que fueron educados así rechazan ese tipo de educación para sus hijos: nada de disciplina, autoridad, esfuerzo no vaya a ser que se traumaticen los niños.

Por último, y esto es de mi cosecha, aquel dicho de "no es muy listo, pero es muy dispuesto". O aquello de "vale para un roto y un descosido" que quería resaltar la valía de una persona para realizar bien diferentes tareas sin mucha relación entre ellas, simplemente por su voluntad de esforzarse, de aprender y de colaborar al bien de la empresa común fuera ésta la que fuera.

En suma, una charla interesante. Y gratis. No entiendo cómo estos actos no se llenan hasta la bandera. Un conferenciante listo, un tema interesante, unas instalaciones comodísimas, una grata compañía. Y, vuelvo a repetir, gratis.

Pero no fue ni será la última vez que suceda esto en Coruña y en cualquier ciudad de España: conferencias, presentaciones de libros y coloquios se quedan a media entrada. No sé en qué anda metida la parroquia.

1 comentario:

  1. Ya me apenaba no haber podido ir a la conferencia, pero ahora me apena más por mí, aunque me alegro por los que sí han ido.

    ResponderEliminar