lunes, 15 de noviembre de 2010

Entre bomberos no nos pisamos la manguera

Cuando ví la foto de González Pons (PP) en la manifestación contra la represión marroquí en el Sahara, me acordé de la frase que titula esta entrada.  Esto de los bomberos se me dijo en una reunión en cierto cenáculo en Octubre 2008, cuando critiqué a Feijoo porque se abrazaba a Quintana y Touriño después de alcanzar un acuerdo para "profundizar" en la normalización lingüística.

Nota: profundizar en la normalización lingüística, es un eufemismo para indicar que se intentaría mandar al fondo del mar la libertad lingüística en Galicia. Más adelante, Feijoo tuvo que cambiar el discurso para ganar las elecciones en Marzo de 2009. Más tarde, tuvo que volver a cambiarlo, a desdecirse. Aun así parió un decreto bastante mejor que el liberticida decreto (124/2007) del bi-gobierno del Psoe-Bng.

También estaban Rosa Díez, Cayo Lara (IU), Fernández Toxo (Comisiones), Méndez (UGT), y la ínclita familia Bardem, creo que también estaba Willy Toledo, ese chico tan simpático para el que los disidentes cubanos que mueren después de una huelga de hambre no son más que delincuentes comunes. En algo acierta Willy, todos ellos tienen algo en común: una gran dosis de valentía, coraje y dignidad.

En esa manifestación, además de González Pons, estaban el grupito de la pancarta de la foto que acusan de cómplices de los supuestos delitos de tortura y asesinato cometidos por Mohamed VI  nada menos que a Obama, Sarkozy y Zp.

Ninguno de estos prebostes de la causa saharaui acudió a Colón el día 6 de Noviembre a apoyar  a las víctimas del terrorismo en contra de la negociación del gobierno con ETA.  Es cierto que en Colón nadie las esperaba ni les echó en falta, ni siquiera al PP. Pero la cosa tiene su explicación, todos estaban en la visita del Papa en Santiago de Compostela rezando por la verdad, la libertad y por España.

Pero volvamos a los bomberos, la frase tiene su intríngulis pues denota que hay uno o varios incendios y uno o varios bomberos que además deben ser cuidadosos para no pisarse la manguera evitando que salga el agua. Llevado al escenario político español: hay tantos incendios y tantos bomberos freelance en el centro-derecha que hay tener cuidado donde se pisa para no estorbarse unos a otros en el proyecto común y principal de recuperación del poder por el PP.

Tan es así que al PP también le sobran el resto de bomberos, el movimiento cívico. Me consta que la dirección del PP impartió instrucciones claras de abandono de un movimiento cívico incómodo que le condicionaba y le hacía rehén de sus causas. Se vive mejor escogiendo tus propias batallas, debieron pensar...

El arriolismo dictó sentencia: la economía es lo que importa. Las demás causas no existen, salvo que las lidere el PP.

Por eso, la segunda legislatura de Rajoy en la oposición ha sido tan dulce y anodina. Ya no interesa la movilización. Eso explica que el día 6 de Noviembre no estuviera el PP en Colón salvo honrosas excepciones a título personal, como la de Santiago Abascal (DENAES). Explica muchas otras ausencias en muchos otros sitios. En realidad explica casi todo además de la mediocridad de su equipo y las portavocías de cuota (Soraya y Cospedal). 

Un partido de amplio espectro, atrapalotodo, no puede ser antipático ni causar tensión ni crispar. Sólo tiene que esperar que la fruta madura caiga del árbol. Eso explica también el repelús que le da a Mariano el movimiento americano Tea Party. Tiene que evitar que surja en España un movimiento parecido, le va mucho en ello. Un movimiento social fuerte en el centro derecha liderado por personas de gran prestigio es lo más parecido al infierno que pueda imaginar Rajoy. Ya se sabe que la mediocridad no se lleva bien con la inteligencia, el esfuerzo, la combatividad y sobre todo con la integridad.

Ahora resulta que a Rajoy le llaman en familia el catalán. Manda huevos..... que diría Trillo.

¡Vaya tropa!


3 comentarios:

  1. Vamos hacer un programa titulado "la verdad al descubierto" y a decir las csas claras sin complejos y poner a cada uno en su sito.
    Si a lo mejor resulta que tenemos lo que nos merecemos...
    Mira por donde, hoy voy a escribir una carta a mi amigo Mariano, le voy amargar la semana.

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  2. Jesús García Barcala15 de noviembre de 2010, 16:09

    ¿Qué tal un movimiento ciudadano liderado por gente común y corriente y no por alguien famoso? tendría más fuerza pues no estaría atado a nada ni a nadie. Además, creo que practicamente no hay en política personas de prestigio que puedan liderar un gran movimiento social. Un saludo.

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  3. Es que no tienen por qué ser políticos al uso. Justamente ahí radicaria el cambio, de políticos profesionales a políticos vocacionales, que se muevan por sus principios y no por sus ambiciones.
    Los cambios que necesita España son algo más que de personas, pero las nuevas ideas requieren nuevas personas.
    De todas formas, hay políticos digamos tradicionales que hubiesen servido para liderar al movimiento cívico, por ejemplo, Vidal Cuadras que prefiere la vida cómoda del Parlamento Europeo y de vez en cuando larga en El Gato.
    Además estamos hablando de cosas complementarias: puede haber un nuevo partido liberal y puede haber un resurgimiento del movimiento cívico, pueden ir acompasados o desfasados pero una cosa no quita la otra.

    Saludos

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